Desde hace unos años, escuchamos la palabra DevOps (del inglés, Development Operations). Se trata de una metodología de desarrollo de software –nacida en plena época de transformación digital de las organizaciones –en la que colaboran los desarrolladores y los profesionales de TI de una compañía. ¿Qué busca una empresa cuando se apunta al DevOps? Que los clientes (sean finales o internos) consigan, con la velocidad que exigen los nuevos tiempos, y sin pérdida de calidad, los productos digitales que necesitan.

Para facilitar la aplicación de esta metodología de desarrollo continuo y flexible, el marco de administración de Cisco Unified Computing System (Cisco UCS) se convierte en un aliado perfecto, ya que todo es programable. Esto es posible gracias a cuatro importantes innovaciones tecnológicas que contribuyen a la integración y estrecha colaboración de los profesionales de sistemas, TI y desarrolladores, además de automatizar y orientar procesos a lograr una mayor eficiencia.

DevOps: Infraestructura, igual a código

Las innovaciones introducidas en la gestión de Cisco UCS tratan la infraestructura del sistema como código. De este modo, los clientes de Cisco pueden decidir cómo quieren que actúe la infraestructura y a qué se debe enfocar. Hablamos, por ejemplo, del hecho de que las configuraciones de identidad y las de cada equipo del sistema se definen en el software, creando políticas y perfiles de servicio. Al no tener que realizar estas operaciones de una en una y de forma manual, la implementación de cambios a escala se simplifica, al tiempo que estamos seguros de contar con configuraciones consistentes.

La segunda innovación que convierte en un todo programable a Cisco UCS es su enfoque centrado en la API, una interfaz de programación totalmente documentada y abierta para permitir y facilitar el trabajo de los desarrolladores de aplicaciones, que son quienes toman el control sobre la API. La tercera innovación está relacionada con las tarjetas de interfaz virtual (VIC), que consiguen que aunque todos los adaptadores de red y SAN se definan por software, el hipervisor los identifique como dispositivos físicos. Por último, está el uso de perfiles y plantillas de servicio. El perfil (o los perfiles) de servicio que creemos a partir de las plantillas le proporcionará al servidor toda la información y la política de infraestructura necesaria para desarrollar aplicaciones. Además, contribuyen a garantizar un entorno estandarizado, evitando el riesgo del error humano.

La integración con terceros del movimiento DevOps

Nadie pone en cuestión hoy día que las alianzas entre las grandes firmas y los proveedores independientes de software (ISVs) son básicas por el valor añadido que aportan a una herramienta como, en este caso, Cisco Unified Computing System. La arquitectura abierta de Cisco UCS soporta más de una docena de proveedores independientes, haciendo posible la integración con Puppet, VMware, Microsoft y OpenStack, entre muchos otros.

Este ecosistema de socios incluye herramientas de configuración, despliegue, orquestación, monitoreo y análisis, es decir, todos los elementos para trabajar con terceros hablando el mismo lenguaje y obteniendo los mejores resultados. La gestión de Cisco UCS se integra con Cisco UCS Director y Cisco UCS Performance Manager. También es un componente esencial de Cisco ONE ™ Enterprise Cloud Suite.

DevOps, la creación propia

La API unificada también facilita el desarrollo personalizado a través de Cisco UCS
PowerTool para Microsoft Windows PowerShell y un software Python Kit de desarrollo (SDK). Gracias a contar con marcos de trabajo para ambos lenguajes, podemos desarrollar productos a partir de PowerShell y de Phyton. Cisco UCS Platform Emulator permite el uso de Cisco UCS Manager y de Cisco UCS API sin necesidad de contar con hardware físico. El uso del emulador tiene varias ventajas: por un lado, acorta de forma importante el ciclo de desarrollo de las aplicaciones basadas en la API Cisco UCS; por otra, permite crear y probar programas utilizando únicamente el emulador (instalado en un ordenador).

En resumen, gracias al potente y flexible sistema de gestión de Cisco UCS y a su perfecta integración con terceros, cada cliente puede configurar la creación y uso de aplicaciones a su medida y acorde a sus necesidades. Al mismo tiempo, la concepción de los productos de Cisco como un todo integrado, desde una visión global y holística, permiten que la auténtica transformación digital de las empresas, a través del uso de la metodología DevOps, deje de ser una utopía, y pase a formar parte del ecosistema natural de la compañía y de su cultura corporativa.